Es probable que durante la entrevista de trabajo estando embarazada surjan dudas y el entrevistador plantee preguntas que, de otra forma, no habría planteado. Así, por ejemplo, es posible que en el entrevistador describa los requerimientos del trabajo y pregunte si estarías capacitada para llevarlo a cabo o no. En este caso es bueno que tengas preparada una respuesta sincera y convincente. No mientas, ya que no te beneficiará. Si no estás capacitada para realizar determinada labor es mejor admitirlo que poner en riesgo tu salud y la de tu bebé.
No estás obligada a hablar sobre la situación de tu embarazo. Sin embargo, si decides hacerlo, sería conveniente que tuvieras bastante claros cuáles son tus planes a nivel laboral (permiso de maternidad, vuelta al trabajo, etc..). Prepárate con antelación posibles respuestas para ir a la entrevista mucho más tranquila.
En cualquier caso, abordes el tema del embarazo o no, recuerda siempre porque estás en la entrevista y ve a por ello. Defiende la importancia del puesto laboral, expón tus puntos fuertes y tu idoneidad para ese puesto. Si notas que el entrevistador solo se centra en el tema del embarazo en sus preguntas en la entrevista de trabajo, toma la iniciativa y trata de redirigir la conversación hacia el aspecto laboral. Eso si, trata de hacerlo de forma discreta y fluida, sin cambios bruscos de tema o negativas rotundas.
Si finalmente deciden no apostar por ti para el puesto de trabajo, puedes preguntar los motivos. Si tienes sospechas de que tu embarazo puede haber sido causa injustificada de discriminación y no estás de acuerdo, puedes buscar a alguien que te asesore legalmente.
¿Es obligatorio decir que estás embarazada en una entrevista de trabajo?
-- Publicidad --